About me

La meva foto
Todos empezamos a escribir por la misma razón: para liberar los pensamientos más profundos que tememos pronunciar en alto; para ahogar nuestras ansias de llorar y de gritar; para libar el sabor de vaciarnos un poco por dentro y llenar, de arriba abajo, una hoja en blanco que sin nuestros pedacitos de alma en vela, seguro seria del todo insustancial. Ésta es la versión más pura de mi alma. Más bien dicho: esta es mi alma en carne viva. Descubre mis palabras, saborea mis ideas insumisas, absorve un poco de mi eséncia. Dicho esto, soy Alessia Garnet: un futuro, joven y prometedor proyecto de escritora. Una pequeña alma blanca, viva, caótica y valiente.

dimarts, 31 de març del 2015

La Rochelle de mes Yeux

Ciao Bloggers, 

Como ya os conté ayer hoy actualizo el blog desde La Rochelle, esta pequeñita ciudad costanera de la que os hablé: perdida en la bañada costa Oeste al Átlantico, escondida en la Francia Occidental a cuestas del mar. 

He tenido tiempo de tomar algunas fotografías que espero os gusten y os hagan sentir un poquito lo que se respira desde aquí: aire con sabor a sal, viento con olor a altamar y gente hecha al más puramente estilo francés.

Café que no sabe a nada, crèpes que saben a delito y jardines siempre verdes resguardados de miradas ignorantes, estupefacientes a aquellos que los sepan valorar.

Imágenes hipnotizantes a ojos cuyas pupilas sepan derretirse al vislumbrar un poco de agua verde e immensa y tierna tranquilidad.

Parajes invisibles a almas cuyas ideas no sepan romper los espejos de la realidad y entrar por completo en el mundo de la subrealidad.

Ça c'est La Rochelle de mes Yeux, ce que je regard, ce que mes yeux voyent.
Ésta es La Rochelle de mis Ojos, lo que observo, lo que mis ojos ven.

Alessia Garnet






diumenge, 29 de març del 2015

Salut, La Rochelle.

Hey, La Rochelle.
Salut, La Rochelle,

I'd like to put you all in context. Maintenant, je suis a La Rochelle. Right now I find myself in La Rochelle, a lost coastal town in the Western side of France. I just arrived an hour ago and the sky has been looking grey ever since we left Barcelona, my hometown. Down there it was warm and sunny but, suddenly, in here it is all cold and foggy. In spite of disliking I am loving it. You may not agree but this is the perfect scenario for what I have in mind, which is: writing, studying, relaxing, not caring about my daily life and focusing in finding my, utterly lost, equilibrium back again because I couldn't be more sincere when I say I really, really gotta bring it back to me. A little bit of peace. A little bit of space. Yes, please.


So you might still be wondering what is it I am doing here (besides the writing and relaxing and bla bla part), well, in that case, the answer is my sister's been living here for three months now for her Erasmus semester so me and her boyfriend just came up here to stay with her for the holidays which, if you have noticed it makes three of us. A corny couple in love and me. Yes, and me. But, seriously, it's fine. Just to be a little bit on my own not caring much about other people, just being a little bit alone with myself in order to resolve this chaos taking place in my mind. This mess hurting in my heart.


This is only the first day, I went for a brief walk around the city right before getting to write this post and I already got some of this cities' essence. I like it. It has something of a graceful and endearing enchant. It's kind of small, quiet and cute. Low buildings, houses, classic and chick bars and stylish boutiques. The harbour, the sea sound, the salty smell flying in the air and a little bit of freedom. Finally, freedom.


So, here I am, La Rochelle, what is it you've got for me?
Alors, ici je suis, La Rochelle, c'est quoi que tu as pour moi?










Kisses, my beloved readers.
Bisous, mes aimées lecteurs.

Alessia Garnet.

dijous, 19 de març del 2015

Equivocar-se

Els moments que ens porten a equivocar-nos.
Els moments que ens porten a cometre errors irremeiables.

A vegades penso en els factors que ens porten a aquests moments. Els factors que activen el detonant d'aquests desastrosos instants.
Em qüestiono si són intrínsecs o bé conseqüents, si són fruits de la casualitat o si, en tots els casos diferents i possibles, ens haguessin dut al mateix resultat.

Crec que aquells que no tenen prou valor per actuar i decidir es posen en boca paraules com destí i casualitat, ambdós descendents de la fortuna, ambdós excuses per justificar accions, preguntes, respostes i remordiments.

Tractar de casualitat els successos inesperats és restar importància a moments vitals, és ignorar portes que ens durien a llocs, situacions o persones increïbles. 
Alhora, tractar de destí als mateixos successos és veure les portes però, en aquest cas, deixar que elles t'escullin a tu.

Les coses bé han de passar per certes raons i a això, d'alguna manera, se li pot dir destí o casualitat. El que no ho és, és el que nosaltres decidim fer envers aquestes, decidir quines portes obrirem i quines tancarem, decidir lluitar o decidir deixar-se vèncer, decidir obrir-ne una o obrir-les totes. Per això són paraules que mai haurien de ser utilitzades com excuses, són paraules trampa. 

És aquí on les persones tenim l'oportunitat de demostrar el que som i el que valem. Com sempre dic, "God made us Human. We choose who to be".

De la mateixa manera, encarar una por no és dolent, en canvi, acceptar-la i deixar-la anar una darrera vegada, deixar-la amagar-se de nou potser sí que ho és. Com ja he esmentat, és la decisió que prenem el que fila el següent moviment del que entenem per destí o, si ets dels que "passa de tot", casualitat.

Tota acció té una repercussió; tota decisió, una altra de conseqüent. No som víctimes del que ens passa (almenys la majoria de vegades), són les nostres pròpies decisions les que ens hi duen. No ens han trencat el cor, hem permès que ho fessin. No l'hem cagat sense voler, hem decidit fer-ho. No hem robat un petó inconscientment, ho hem fet plenament conscients.

Ser conseqüents, ser valents. Equivocar-se. Obrir o tancar portes.


Alessia Garnet

dijous, 12 de març del 2015

Sometimes, I hate nature.


Sometimes I hate nature. Yes, indeed I do. I hate its simplicity, its harmony, its perfection. I hate how simple it is its reason to be. How simple its beauty and its awesomeness and then how hurting and painful when spring is rushing and approaching impregnating it all of colours and sweetness on its way. Apparently, nature is just nature but, as my dear writer Arthur Golden wrote, "when we feel pain, even the blossoming trees seem weighted with suffering to us..."

(On the right: a homemade picture of the blossoming Acassia sp. tree in my garden)






Alessia Garnet.

dimecres, 4 de març del 2015

Sal con un valiente!

Ciao bloggers!

Hoy os ofrezco un artículo genial con el que he tropezado esta tarde en mi sesión de FB-Zapping. "Sal con un valiente" me parece la filosofia perfecta y exacta para vivir viviendo de verdad y es que, en este preciso momento de mi vida, no podria sentirme más identificada con las ideas que transmite el autor. Sal con un valiente, debes saber que no te mereces nada por debajo.

Disfrutad de las palabras, mis querido bloggers y, como siempre digo, "que el sonido de nuestras risas sea mayor que el de cien guerras indecisas, y que nuestras palabras sean siempre fuertes e insumisas".

Alessia Garnet


No existe hombre tan cobarde como para que 
el amor no pueda hacerlo valiente 
y transformarlo en héroe.
Platón

El mensaje es claro: sal con un valiente. Esto no quiere decir que intentes, a ser posible, salir con un valiente, no. Quiere decir que salgas con un valiente. Con un valiente o nada.

Nadie debería enamorarse de alguien que, tras el tiempo suficiente, no sea capaz de decirte: “mi apuesta eres tú”. All in. Todo el mundo merece escuchar, al menos, un “¿sabes qué?, me la juego contigo”.

Al igual que tú, he visto a personas reaprender un deporte tras perder algunas partes de su cuerpo; he visto a gente trabajar meses o incluso años sin cobrar y a otros trabajar en un restaurante de comida rápida para terminar y ponerse a escribir, pintar o bailar porque eso no les da aún de comer; y he visto a un hombre que no puede vocalizar ni coger un lápiz revolucionar la ciencia… Y aún así, siempre hay alguien que dice: “no, es que no es mi momento”, “es que estoy centrado en mi trabajo”, “es que salgo de una relación” y demás excusas para llevarse el polvo pero dejar el mueble. Si hay amor se encuentra la manera.

Vivimos en una época donde no hay dragones que matar ni tierras que conquistar, y donde el acceso a recursos y las oportunidades son tan abundantes que saber lo que se quiere e ir tras ello constituyen el único espacio para el heroísmo. Hoy, el (principal) problema no es que no se pueda, sino que no se quiera lo suficiente. La mayoría de cosas que no hacemos no es por dificultad, es por falta de amor.

Creo que la valentía es el valor más grande que puede tener un ser humano. Un valiente arriesga, elige, toma partido, se hace responsable y crea su destino. Es el capitán de los optimistas, pues no solo ve lo bueno sino que lo persigue sin negociar. Una persona así solo puede hacer tu vida más rica.

Como le gusta decir a Álex Rovira, “el coraje, más que la ausencia de miedo es la consciencia de que hay algo por lo que merece la pena que arriesguemos. El coraje es la fuerza del amor al servicio de la consciencia”. Y es que coraje y amor son atributos que se ven en el espejo: el que ama, arriesga y el que arriesga, ama.

“Detrás de alguien que arriesga, hay alguien que ama.”

Cuando no sepas dónde están esos valientes, fíjate en los que dicen sí diciendo no, pues detrás de alguien que renuncia hay una persona que elige, detrás de alguien que elige hay una persona que arriesga y detrás de alguien que arriesga hay una persona enamorada. Donde hay un valiente, hay un amante.
Lo que diferencia a alguien valiente de un “cobarde” es que no se queda parado ante la bifurcación pensando en lo que pierde o en lo que renuncia, sino que ve en ti una victoria y ganancia suficiente como para no tener que mirar atrás. No se echa a un lado pensando que siempre puede venir algo mejor, porque acepta que el mundo es imperfecto, que tú lo eres… que los dos lo sois. Sabe que lo importante no es ni larealidad, ni lo que hay, sino lo que podéis llegar a crear, y para eso no hace falta ser perfectos, hace falta ponerse manos a la obra.

Una persona valiente no está pensando en las chicas o en los chicos que deja escapar, está pensando en ti. Eres su apuesta y su elección, y cualquier otro lugar le parece segunda división.

Nunca verás a un valiente haciendo una lista de pros y contras, porque para ellos el amor no es un mercado ni tú un producto más. Las decisiones racionales las deja para los yogures o las hipotecas, nunca para sus sueños. Nadie se hizo rico apostando en pequeñas cantidades.


“Los valientes se la juegan porque “esa aventura no se la pierden”.

Si lo piensas bien, muchos de los dolores de cabeza amorosos que has tenido podrían haberse evitado saliendo con un valiente. Así que, la próxima vez que vayas al mercado de parejas de viaje, solo tienes que abrir los ojos y mirar de una forma que quizás no hayas hecho antes: en lugar de buscar por la categoría belleza, profesión, estudios, o dinero, busca por la categoría sé quién soy/sé que quiero. Desconfía de lo pulcro, los cánones y lo resplandeciente, y fíate de la sangre y lo sucio, pues los valientes están llenos de arañazos y cicatrices, aunque a veces no se vean. Los valientes se baten el cobre, son los que bajan a la arena y se la juegan porque esa aventura “no se la pierden”. Es muy difícil encontrar a un valiente con el traje impoluto.

Un valiente no entiende la estúpida forma que tiene la cultura de valorar el éxito o el fracaso y la pérdida o la ganancia, pues cree que a nadie que lo ha dado todo se le puede exigir nada y que lo único que verdaderamente se puede perder en la vida no es una pareja, un partido, un sueldo, etc., ellos saben que lo único que verdaderamente se pierde en la vida son oportunidades.


*(Y digo un valiente como digo una valiente. Me niego a afear un post con arrobas y barras si puede sobreentenderse).

Autor: Pablo Arribas
Link: http://www.eluniversodelosencillo.com/sal-con-un-valiente/